martes, 28 de septiembre de 2010

Condecoración a un amigo: Guillermo Dañino y China

El profesor peruano Guillermo Dañino condecorado por su difusión de China
Pekín, 28 sep (EFE).- El polifacético profesor peruano Guillermo Dañino Ribatto (Trujillo, 1929) fue condecorado hoy con un galardón diplomático en reconocimiento por su labor de difusión de la cultura china en los últimos treinta años.
"En China lo imprevisible llega a ser normal. Y lo imprevisible sucedió para mí hace 30 años", explicó el profesor Dañino al recordar su llegada a China en 1979, en una conferencia celebrada hoy en la sede del Instituto Cervantes de Pekín.
Fue hace treinta años cuando este peruano de origen genovés, que estudió filosofía y teología en la Congregación de los Hermanos La Salle y con estudios en la Universidad de la Sorbona (París), fue invitado a China por el gobierno como profesor de español, y desde entonces ha publicado y traducido más de 18 obras del país asiático.
"Me enamoré de China por su gente", señaló a Efe Dañino, quien se confiesa taoísta y católico al mismo tiempo, y que ha ejercido como profesor de taoísmo, semiótica, filosofía y literatura chinas en la Pontificia Universidad Católica del Perú y en el Centro de Estudios Orientales.
Bajo el título Del río Amarillo al río Hablador, el doctor estableció un vínculo cultural entre esos dos caudales: el primero, origen de la cultura china, y el segundo, el que da nombre a Lima, el Rímac, que en idioma quechua significa "hablador".
En su conferencia, Dañino desgranó anécdotas y recuerdos de tres décadas en China, destacó la amabilidad de los chinos con los que trató desde su llegada, rememoró su descubrimiento del Confusionismo y leyó e interpretó proverbios y poemas de la dinastía Tang.
El reconocido hispanista chino Dong Yansheng, traductor de Don Quijote, presentó a su amigo con humor y respeto.
"Guillermo dice que no nos asustemos por su apellido porque no es dañino, pero yo digo que sí, al menos cinematográficamente", bromeó al referirse a la interpretación que del embajador de Estados Unidos hacía el peruano en un famoso serial televisivo sobre la vida y obra de Mao Zedong (Mao Tse-Tung).
La de actor fue una de las múltiples facetas que Dañino llegó a desempeñar en la República Popular, quizás la más trivial y la que más popularidad le dio, pero complicó sus problemas de identidad, lo que plasmó en su obra autobiográfica ¿Y ahora quién soy yo? (2005).
El embajador del Perú en China, Harold Forsyth, fue el encargado de ofrecer a Dañino la condecoración con la Orden "Al Mérito del Servicio Diplomático del Perú José Gregorio Paz Soldán" en el grado de Comendador por su aporte al conocimiento y difusión de los estudios orientales y por los vínculos académicos entre Perú y China. EFE

sábado, 25 de septiembre de 2010

Suite francesa, Irene Némirovsky

Suite francesa, de Irene Némirovsky (Salamandra). Un libro que uno no puede dejar de leer, y que lamenta terminar.
si no fuera tan trágica la vida de la Némirovsky, uno podría pensar que también fue como la de un personaje literario. Nació en Kiev en 1903, y después de la revolución rusa, la familia se exilió en Francia. Allí estudió Letras en La Sorbona y publicó su primera novela. En 1941 es deportada a un campo de prisioneros en Francia, y de allí la enviaron a Auschwitz, donde falleció en agosto de 1942. Suite francesa es una obra póstuma, publicada gracias a sus hijas, quienes, siendo niñas, y en su largo periplo huyendo de los nazis, cargaron con una maleta que contenía el manuscrito (sic) de la madre. La obra quedó inconclusa. Es una inteligentísima y sutil pintura de la caída de Francia en la segunda guerra a través de los ojos de los personajes: los aristócratas, los burgueses y los campesinos.  Retrata el éxodo de los franceses cuando pierden la guerra, la posterior llegada de los alemanes a las ciudades y pueblos y por último la convivencia forzada, el colaboracionismo y la resistencia. Las luces y las sombras de lo humano. Termina la novela cuando los alemanes se van al frente ruso. Los personajes, las situaciones, la psicología, los perfiles, todo, en fin, hacen a este libro una lectura no sólo interesante, sino que llena de pasión. Podría emparentarse con la sensación que provoca leer a Sandor Marais o, más cercano en el tiempo, a Andre Makïne (El testamento francés).

bitácora

día de los inocentes

la ciudad, desierta; el viento, silenciado; las azoteas, liberadas.
el escritor piensa. el personaje espera. la trama es inexacta. génesis, 6.